Bueno, no sé si habéis oído hablar del masaje tántrico, pero aquí os voy a explicar un poquito en lo que consiste...
Este tipo de masaje es una técnica que es totalmente enriquecedora y placentera. Con este masaje descubrirás tu capacidad de recibir placer. Se inspira en la filosofía induista, ya que mediante las caricias de las zonas eróticas intenta lograr el equilibrio sexual. Posee una finalidad más allá del placer: entrar en lo más profundo del subconsciente llevando un rayo de esperanza a cada función específica, analizando las inquietudes y los deseos de la persona y eliminando el conflicto, la insatisfacción y la inquietud.
Éste posee una finalidad más allá del placer: entrar en lo más profundo del subconsciente llevando esperanza a cada función específica, analizando las inquietudes y los deseos de la persona y eliminando el conflicto y la insatisfacción.
Mediante este masaje nos damos cuenta del gozo que podemos llegar a sentir solo mediante el tacto...
Dentro del masaje tántrico hay que diferenciar entre dos tipos: el masaje de Yoni y el masaje Linman.
MASAJE YONI:
Su finalidad no es el orgasmo aunque, si se llega, mejor que mejor, ¿no?
Nota: Yoni es el aparato genital femenino.
Previo al masaje debemos preparar el ambiente apropiado, el más propicio para un relax total. Para ello, elige o crea un espacio que os permita sentiros cómodos y en contacto con vosotros mismos. El masaje lleva su tiempo y éste debe ser respetado a toda costa. Debe haber una conexión con nuestra pareja mediante el contacto físico: abrazándonos, acariciándonos…
La mujer debe estar acostada, en una posición confortable, con una almohada bajo su cabeza, de forma que pueda mirar hacia la zona de sus genitales y, a la vez, a su pareja. Se debe colocar otra almohada bajo su cintura para mayor confort. Debe situarse con las piernas abiertas y con las rodillas ligeramente dobladas.
Quien vaya a realizar el masaje debe sentarse entre las piernas de su pareja de forma que pueda tener total acceso al Yoni y a las otras partes del cuerpo de su compañera.
Cómo hemos dicho, la respiración es muy importante. Antes de comenzar el masaje, tenéis que respirar profundamente, una respiración relajante que os preparará para el masaje.
Cómo hemos dicho, la respiración es muy importante. Antes de comenzar el masaje, tenéis que respirar profundamente, una respiración relajante que os preparará para el masaje.

Comenzaremos masajeando el abdomen, los muslos y los pechos de nuestra pareja. ¡Aún no masajees el Yoni!, esta fase servirá como introducción relajante al masaje. Tras unos instantes de masaje introductorio, es el momento de lubricar el Yoni. Para ello coloca una pequeña cantidad de aceite o lubricante en el montículo del Yoni. Éste debe derramarse sobre el labio exterior y cubra la parte externa de la vagina, y comenzamos a masajear suavemente el montículo del Yoni y los labios externos.
Con mucha suavidad, coge el labio exterior con el pulgar y el índice y recorreremos todo su largo de los dos labios, en forma ascendente y descendente.
Hacemos lo mismo con los labios interiores, en la misma forma, pero aún con más suavidad ya que éstos son aún más sensibles. La chica puede masajearse a sí misma los pechos. Para aumentar las sensaciones, debéis miraros a los ojos tanto como sea posible.
Hacemos lo mismo con los labios interiores, en la misma forma, pero aún con más suavidad ya que éstos son aún más sensibles. La chica puede masajearse a sí misma los pechos. Para aumentar las sensaciones, debéis miraros a los ojos tanto como sea posible.
Tras esto último se empieza a masajear el clítoris: Los movimientos deben ser suaves, circulares y muy precisos. (¡Con cuidado chicos!) Cogemos el clítoris entre nuestros dedos y lo presionamos suavemente.
Con mucha suavidad, introduce el dedo medio de la MANO DERECHA dentro del Yoni. La mano derecha (no la izquierda) ya que se relaciona directamente con la polaridad en el Tantra y es de suma importancia para un óptimo resultado final.
Con mucha delicadeza, masajea suavemente el interior de la vagina. Aumentaremos la velocidad pero no enloquecidamente.
Con mucha delicadeza, masajea suavemente el interior de la vagina. Aumentaremos la velocidad pero no enloquecidamente.

Debeis ir variando la fuerza, la forma, la velocidad y la presión de los movimientos que vais realizando de una forma paulatina y dependiendo de las sensaciones que experimente la chica. (Observarla bien chicos, ella os guiará con sus reacciones!!!)
Con una rotación de muñeca, dejaremos la palma de la mano mirando hacia arriba y moveremos nuestro dedo desde la posición extendida hacia la palma de nuestra mano, doblándolo lentamente y sin hacer excesiva fuerza. El gesto es como si estuviésemos pidiendo a alguien que se nos acerque.
Notarás una zona de tejido esponjoso justo debajo del hueso pélvico y detrás del clítoris. Este es el punto sagrado tántrico (el punto G).
Notarás una zona de tejido esponjoso justo debajo del hueso pélvico y detrás del clítoris. Este es el punto sagrado tántrico (el punto G).
Una vez encontrado este punto haremos movimientos circulares, de adelante hacia atrás o de un lado hacia el otro.
También podemos insertar el dedo que se encuentra al lado del medio. Esto proporciona más placer y excitación en la mujer.
También podemos insertar el dedo que se encuentra al lado del medio. Esto proporciona más placer y excitación en la mujer.
Otra posibilidad es introducir el dedo meñique en su ano, mientras seguimos con el masaje. Para ello será necesario el uso lubricantes y ser aun más delicados.
MASAJE LINMAN:
Lingam es la palabra sánscrita para denominar el órgano sexual masculino. El masaje del Lingam tiene como finalidad relajar al hombre y acercarlo a su lado más sensible. Este tipo de masaje ayuda a arreglar o sanar alguna mala experiencia relacionada con el sexo.
Para una realización adecuada de este masaje es importante una preparación física y espiritual.
Para comenzar debemos preparar el ambiente en la pareja y crear una conexión. Para ello es preciso empezar con un acercamiento previo: tiernas caricias , abrazos y miradas dulces...todo con la idea de derribar los obstáculos o fronteras que estén separando a la pareja.
Para comenzar debemos preparar el ambiente en la pareja y crear una conexión. Para ello es preciso empezar con un acercamiento previo: tiernas caricias , abrazos y miradas dulces...todo con la idea de derribar los obstáculos o fronteras que estén separando a la pareja.

Se coloca un poco de lubricante sexual y se esparce tanto en el lingam, cómo por los testículos. Se debe iniciar el masaje en los genitales y en el escroto, procurando que se relaje toda la zona. Ahora, se acaricia suavemente el perineo (entre los testículos y el ano). ¡Pero ser muy cuidadosas chicas!, ya que es una zona que casi ningún hombre heterosexual ha permitido que le toquen nunca.
El siguiente paso es acariciar el Lingam, variando la presión y la velocidad. Este es un factor importante para que aumente el placer.
Con tu mano derecha, presiona la base del Lingam. Desliza tu mano de abajo a arriba, aunque alternando con la mano izquierda. Continúa estos movimientos, y después empieza a presionar la cabeza del Lingam. Pero sigue alternando lo de las manos.
El siguiente paso es acariciar el Lingam, variando la presión y la velocidad. Este es un factor importante para que aumente el placer.
Con tu mano derecha, presiona la base del Lingam. Desliza tu mano de abajo a arriba, aunque alternando con la mano izquierda. Continúa estos movimientos, y después empieza a presionar la cabeza del Lingam. Pero sigue alternando lo de las manos.
A estas alturas se acerca el orgasmo, la eyaculación, así que se debe detener un poco la estimulación ya que este no es el objetivo. Para el masaje tántrico alargar lo más posible la eyaculación es una forma de obtener más placer. Con esta prolongación, también despertamos el Kundalini (flujo energético en el cuerpo humano). Además, es una buena forma para que el hombre se convierta en multiorgásmico. (al igual que la mujer con el masaje del yoni)
Se continúa masajeando el Punto Sagrado. Éste se encuentra entre el ano y los testículos. De forma suave, ya que es una zona delicada y no debemos causar dolor. Este masaje se hace con la izquierda mientras acaricias el Lingam con la derecha.
Se puede buscar el Punto sagrado internamente por el ano, aunque si se hace debe ser con la total aprobación del hombre. En caso de hacerlo así, usad lubricante e introducid el dedo y buscar el punto, moviendo el dedo hacia vuestra palma. Se puede estimular el Lingam al mismo tiempo, pero recordad, sin que llegue al orgasmo.
Cuando el hombre sienta deseos de llegar al orgasmo, que lo haga, pero recordadle que debe respirar mientras lo experimenta, para que el momento sea extremadamente placentero.
Espero que os haya gustado. Disfrutad!!
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